12 Nov EMMANUEL LOS HACE SENTIR VIVOS
Íntima conexión entre Emmanuel y sus seguidores
Cuando escuchas que un artista cantará sus éxitos, lo primero que piensas es que no tiene canciones nuevas que interpretar. Pero qué tal si es un cantante hecho en México y de talla internacional como Emmanuel.
El concierto se vuelve único y de los mejores que ha ofrecido a lo largo de toda su carrera en Mérida.
La madrugada de ayer, en el palenque de la Feria Yucatán Xmatkuil 2018, Emmanuel ofreció un recorrido musical por toda su carrera, uno que incluyó esos temas que llevó a los que siguen su música por un viaje en el tiempo y hasta los inicios de su carrera.
Todos los éxitos de Emmanuel
Entre sus “clásicas” baladas y temas llenos de energía, el show arrancó a las 11:20 con “Corazón de melao” ante un foro lleno que salió disparado de sus asientos como resorte desde los primeros acordes; el público se entregó a su artista hasta minutos después de la una de la madrugada que se despidió por tercera y última vez. “Seguía lloviendo afuera”, “Solo”, “Pobre diablo”, “Quiero dormir cansado” y “Detenedla ya” conformó el primer bloque con el que Emmanuel deleitó a sus seguidores, todos conocedores de su carrera porque con cada estrofa nueva del “medley” se escuchaban los gritos de aceptación y las cómplices miradas entre el público como reafirmando que haber asistido al concierto fue la mejor decisión en mucho tiempo.
Acompañado de una veintena de personas, entre músicos y coro, vestido con pantalón, camisa, chaleco y saco negro, este último con piedras blancas y plateadas, el cantante se metió en el corazón del público desde el primer instante; pero lo hizo también en sus pulmones, pies y caderas en el instante que cantó “Bella señora” y “Rey azul”.
“Este terco corazón”, “Tengo mucho que aprender”; “Es mi mujer”, “Hay que arrimar el alma”, “La vida caminaba sola” y “Sentirme vivo” completaron el segundo bloque que al terminar Emmanuel tenía intención de salir del escenario como primera despedida, pero que sus seguidores le impidieron al invadir el pasillo al camerino con la intención de saludarlo, lo que en lugar de molestarlo le arrancó una sonrisa y obligó a solo quitarse el saco y seguir cantando.
Después de “Con olor a hierba”, “El día que puedas” y otro largo popurrí que incluyó “Todo se derrumbó” y “Tu y yo” logra ir al camerino y regresar vestido todo en color vino para entregarse en un último momento de la velada, que cerró con la misma energía con que inició y a todos los presentes cantando y brincando en sus lugares la alegre “Chica de humo”, “Toda la vida” y “La última luna”: — Renata Marrufo Montañez